domingo, 10 de junio de 2012

La NASA descubre un bosque bajo el hielo del Ártico


Es un bosque en medio del desierto helado. Así lo describen, en un comunicado, los científicos que han descubierto, en una expedición de la NASA, que el Océano Ártico se está tiñendo de verde por la proliferación de plantas marinas microscópicas, que son esenciales para la vida en otros mares, pero que no habían sobrevivido hasta ahora en un ecosistema tan frío.
El calentamiento global está, según el trabajo que publican esta semana en 'Science' detrás de un fenómeno que hasta ahora no se había detectado en toda su amplitud.
La expedición ICESCAPE (siglas de Impactos del Clima en los Ecosistemas y la Química del Ártico) exploró las aguas de los mares de Beaufort y Chukchi, en Alaska, a bordo de un rompehielos estadounidense. "Hemos observado una masiva expansión del fitoplancton entre 800 centímetros y 1,3 metros en la capa helada del primer año en el mar Chukchi", aseguran los autores.
Esa capa se extiende en más de 100 kilómetros, un fenómeno que no había sido observado hasta ahora. El equipo ahora lo ha descubierto, ya fue capaz de encontrar hace un tiempo una 'selva amazónica' en medio del desierto de Mojave, en California, como recuerda Paola Bontempi, del programa de Biología Oceánica de la NASA.
Comparativa del hielo en 1979 y 2011,
recogida por la NASA.
Los cambios en el Ártico ya habían sido detectados por imágenes de satélite de la NASA. La expedición tenía como objetivo confirmar los datos, en un lugar de difícil acceso desde tierra.
Hasta ahora se pensaba que estas plantas que tiñen de verde el agua y son la base de la cadena alimenticia marina, sólo crecían después de que el hielo del mar se retiraba, lo que ocurre en verano. El problema, dice el biólogo Sam Laney, del Woods Hole Oceanographic Institution, está en que, igual que un aguacero hace florecer el desierto, la acumulación de agua de deshielo en cortos periodos de tiempo en el Ártico tienen importantes efectos sobre el ecosistema.
Según sus análisis, al adelgazarse el hielo, la luz solar llega a las aguas que hay bajo la capa helada sobre el mar, lo que permite que la planta se desarrolle. "Si alguien me hubiera preguntado si veríamos flores bajo el hielo, les habría dicho que no era posible", reconoce Kevin Arrigo, de la Universidad de Stanford y líder de la expedición. "Ha sido una completa sorpresa", ha asegurado.

Una nueva luna en Júpiter

Un pequeño mundo de tan solo 2 kilómetros de diámetro puede ser la luna más pequeña conocida de Júpiter. Esta diminuta roca, digna de ser el hogar del Principito, fue descubierta recientemente junto a otra compañera en la órbita del planeta gigante. El hallazgo será publicado en la revista Astronomical Journal. 
En septiembre de 2010, dos lunas distantes y hasta entonces desconocidas de Júpiter fueron detectadas por un equipo internacional de científicos durante el seguimiento rutinario de las otras lunas ya conocidas. Estos objetos fueron observados de nuevo en varias ocasiones, a fin de determinar que en realidad eran satélites de Júpiter y no asteroides cercanos. En junio de 2011, por fin, se les otorgó las denominaciones de S/2010 J 1 y S/2010 J 2.
La determinación de la órbita de estos satélites ha sido afinada lo suficiente como para que su posición se pueda predecir de forma fiable durante varios años en el futuro.
Los investigadores pudieron estimar el tamaño de las lunas basándose en su brillo. Calculan que S/2010 J1 tiene unos 3 kilómetros de diámetro, mientras que S/2010 J2 solo tiene 2 km. S/2010 J 2 es el más débil (y por tanto más pequeño probablemente) satélite joviano descubierto hasta la fecha. J1 gira a unos 20 millones de km de Júpiter, mientras que J2 lo hace a unos 23 millones. 
Con estas nuevas incorporaciones, Júpiter tiene ya 67 satélites conocidos. 

Fuente: http://www.noticiasciencias.com/

viernes, 8 de junio de 2012

Cuál es tu huella ecológica?


La incidencia de cáncer aumentará un 75% hasta 2030


El cáncer se ha convertido en una cara conocida para los habitantes de los países desarrollados. Sin embargo, no sólo afecta a las personas que viven en las partes privilegiadas del planeta. Cada vez son más los ciudadanos que, independientemente de su origen, terminan sufriendo un cáncer a lo largo de su vida. Para conocer cuál puede ser el panorama dentro de unos 20 años y establecer alguna medida de prevención, investigadores franceses han realizado un estudio con una base de datos global, relacionando los casos de cáncer con el nivel de vida y realizando una predicción sobre la evolución de esta enfermedad. Según sus cálculos, para 2030 la incidencia de cáncer aumentará un 75% y lo hará, sobre todo, a costa del cambio en el estilo de vida de los habitantes de los países menos desarrollados.
Actualmente, los siete tipos de cáncer más frecuentes en la población mundial son el de pulmón, cáncer de mama (en mujeres), colorrectal, de estómago, de próstata, de hígado y de cuello de útero o cérvix. Según previsiones de Naciones Unidas, para 2030 el número de personas que habitarán el planeta será de 8.300 millones. El efecto de ese aumento de población y del envejecimiento será mayor sobre todo en los países de bajos y medios ingresos.
Teniendo en cuenta los cambios en la población, la Agencia Internacional para la Investigación en Cáncer (IARC, según sus siglas en inglés) de Lyon, Francia, ha recopilado la incidencia y la mortalidad de 27 tipos de cáncer en 184 países a lo largo de 2008 y, aplicando un modelo estadístico, ha establecido una estimación de la enfermedad para 2030. Se trata del primer estudio que establece un panorama sobre cómo puede variar su incidencia en las próximas décadas en diferentes regiones del mundo en función de sus recursos.
El estudio revela que el cáncer de próstata, el colorrectal y el de mama están aumentando en la mayoría de países de medios, altos o muy altos ingresos, principalmente debido a la ingesta de una dieta poco equilibrada y a la falta de ejercicio. En cambio, en estos países está disminuyendo la incidencia de cáncer de estómago y de cérvix.
En los países con escasos ingresos, sobre todo aquellos del África subsahariana, la incidencia más prevalente será la de aquellos cánceres cuyo origen se encuentra en infecciones, en concreto el cáncer de cérvix, el de hígado, el de estómago y el sarcoma de Kaposi. Por el contrario, los países más ricos se enfrentarán a un mayor número de tumores relacionados con el tabaquismo y la obesidad. Porque, aunque la tasa de cáncer de pulmón está disminuyendo entre los hombres que habitan en países con altos recursos, está incrementando entre las mujeres. Sin embargo, los autores de este estudio advierten de que este tumor, que ahora no es un problema grave en las regiones de bajos recursos, puede llegar a convertirse en el más frecuente entre estos habitantes a menos que el tabaquismo sea controlado eficazmente en estas áreas.

El clima de la Tierra podría alcanzar un punto de no retorno

Un artículo publicado en Nature, con participación española, alerta del posible cambio irreversible del estado planetario actual por causas de origen humano. Los dos problemas principales son el consumo de combustibles fósiles y la alta tasa de crecimiento de la población mundial.
La revista científica Nature publica esta semana un artículo, con la participación de científicos españoles, que advierte del posible cambio del estado planetario actual. Según las conclusiones, la posibilidad de alcanzar un punto de no retorno de la situación se debe al consumo de combustibles fósiles y a la alta tasa de crecimiento de la población mundial.
El impacto del conjunto de alteraciones que está sufriendo el planeta es mayor que la suma individual de cada una de esas alteraciones.
Jordi Bascompte, investigador de la Estación Biológica de Doñana del CSIC y coautor del trabajo, dice que “estos cambios parecen involucrar alteraciones en la química de la atmósfera y los océanos, y grandes trastornos en los flujos de energía desde el principio hasta el final de la cadena alimentaria”.
El incremento de la población está asociado a un mayor consumo de recursos y energía, y a la transformación y fragmentación del paisaje que alteran las condiciones atmosféricas, oceánicas y terrestres que, a su vez, amenaza la supervivencia de la biodiversidad actual.
El trabajo también señala aspectos como una pérdida de la productividad en las tierras de cultivo, una menor capacidad de almacenamiento de CO2 y el colapso del stock pesquero.
Eloy Revilla, investigador de la Estación Biológica de Doñana y otro de los autores del trabajo, considera que “incluso las áreas inalteradas del planeta sufrirán las consecuencias si estos impactos directos superan el 50%”. Según el artículo, si la tasa de incremento de la población se mantiene y también lo hace el nivel de consumo de recursos, este porcentaje será alcanzado hacia 2025 y llegará al 55% en 2045.
Para minimizar estos posibles impactos y no superar la barrera del 50%, el estudio propone las siguientes medidas: reducir la tasa de crecimiento anual de la población y su consumo de recursos asociado, sustituir el mayor nivel energético posible por fuentes renovables, aumentar la eficiencia en la producción de alimentos y mejorar la gestión de las zonas de la Tierra que aún no han sido dominadas por humanos.
Según el artículo, la humanidad está en una encrucijada crítica en la que debe decidir si quiere guiar los cambios del planeta o simplemente dejar que las cosas sucedan. Según Revilla: “esos porcentajes deberían preocuparnos muy seriamente”.

Fuente: http://www.noticiasciencias.com/

jueves, 7 de junio de 2012

La vacuna oral contra el cólera


Por fin una buena noticia. En buena parte del planeta donde se sufre hambruna, más de 1.100 millones de personas no tienen acceso al agua potable y 2.600 millones no disponen de un saneamiento e higiene básicas, enfermedades 'olvidadas' en países desarrollados, como es el caso del cólera, siguen siendo sinónimo de muerte segura. Pero ahora, la administración masiva de vacunas orales contra el cólera puede mejorar a las clásicas vacunas inyectables en la prevención contra esta enfermedad.
El responsable de esta 'victoria' contra el cólera tiene nombre propio, Shanchol, y es una de las dos únicas vacunas orales disponibles que existen actualmente contra el cólera. Armados con ella, la ONG Médicos sin Fronteras (MSF) la ha utilizado por primera vez en la historia de forma masiva durante una epidemia en Guinea, siendo también la primera vez que se utiliza en África.
Por primera vez en al Historia, vacunación
m
ásica contra el cólera durante una epidemia.

Aunque con esta vacuna ya se empezó a trabajar en el año 2008 en Vietnam, la población que se benefició de ella fue de escasamente 500 personas. Tras comprobar su eficacia en varios ensayos clínicos como el que se produjo a gran escala en la India en el año 2011; ese mismo año, la Organización Mundial de la Salud (OMS) la avaló, convirtiéndola así enla segunda vacuna oral de este tipo que recibía luz verde por parte de esta organización.
"El único problema con estas vacunas orales contra el cólera es que exigen de dos dosis, separadas entre sí por unas dos semanas o más, para que el efecto inmunitario sea el adecuado", explica el doctor José María Marimón, miembro de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (Seimc).
En el caso del proyecto de vacunación guineano, MSF consiguió vacunar en la primera ronda a cerca de 150.000 personas, un 92% de la población estimada (algo más de 163.000), mientras que en la segunda fase la cifra bajó a poco más del 68%.
Junto a Shanchol, la otra vacuna existente es Dukoral que en la actualidad se utiliza en más de 60 países. "Esta vacuna también requiere de dos semanas de espera entre ambas dosis y, en cuanto a efectos, es prácticamente igual que Shanchon. Ambas están fabricadas con células enteras de 'Vibrio Cholerae' muertas, aunque Dukoral además añade la subunidad B de la toxina de la cólera que genera más anticuerpos, pero ambas son eficaces. Las dos consiguen un nivel de inmunidad elevado, alrededor del 85-90%, aunque a partir del tercer año baja bastante", señala el doctor Marimón.
En este caso, MSF indica que pasados esos años la eficacia rondaría el 65%. Pero además, hay otra buena noticia. Mientras que Dukoral se puede administrar a niños a partir de los dos años, Shanchol es a partir del año de edad. "Este tipo de vacunas son inocuas para los niños, las embarazadas o los afectados por VIH y sus efectos secundarios son escasos. Normalmente, a los niños muy pequeños, con menos de dos o tres años, no se les solía vacunar porque su sistema inmunitario todavía no se ha formado y no desarrollan la inmunidad, cosa que es una lástima porque tienen alto riesgo de sufrir estas enfermedades", argumenta Marimón.